A diferencia de las pérgolas clásicas, que tienen más que nada una función estética para revestir de elegancia los espacio exteriores de tu hogar, la pérgola bioclimática está equipada con hojas o lamas totalmente ajustables que te permiten adaptarla a las diferentes inclemencias del tiempo en función de la época del año: lluvia, sol, viento… Disponibles en muchos colores, formas y materiales, las pérgolas bioclimáticas ofrecen muchas ventajas a precios cada vez más asequibles. Pero, una vez hecha la inversión ¿qué cuidados debes proporcionarle para mantener tu pérgola bioclimática en buen estado? En nuestro artículo de hoy te lo explicamos.

¿Qué son las pérgolas bioclimáticas?

Las pérgolas bioclimáticas son estructuras que permiten una protección inteligente contra el sol y las inclemencias del tiempo, ya que sus lamas ajustable pueden adecuarse a cualquier tipo de clima.

Operadas manualmente, usando un interruptor o incluso un control remoto, las hojas ajustables de las pérgolas bioclimáticas proporcionan un confort óptimo en cualquier clima. Hay que tener en cuenta que la mayoría de los modelos son eléctricos y están equipados con sensores de lluvia, viento y temperatura que permiten ajustar la orientación de las palas en tiempo real en función del clima.

pérgola bioclimática

Lamas de orientación adaptable al clima

● Lamas cerradas: gracias a los sellos presentes entre cada tablón, el agua no está invitada en la terraza. Por lo tanto, esta configuración permite protegerse de la lluvia y el sol.

● Lamas abiertas a 90°C : esta orientación de las cuchillas le permite beneficiarse de una hermosa luz, incluso en tiempo de sombra.

● Opciones intermedias: ideal para protegerse de la luz excesiva mientras te beneficias de un espacio bien ventilado en el caso de una abertura de al menos 45 ° C.

Más allá de su orientación, también puede elegir la dirección de las hojas de su pérgola bioclimática. Se recomienda la instalación de lamas paralelas a la fachada si tu casa tiene una orientación completa hacia el Sur, mientras que lo ideal será la instalación de hojas perpendiculares si está orientada hacia el Este o el Oeste.

Cómo mantener tu pérgola bioclimática en buen estado paso a paso

En realidad, mantener tu pérgola bioclimática en buen estado es sencillo porque este tipo de pérgolas requieren muy poco mantenimiento para que funcionen correctamente durante todo el año. Sin embargo, de vez en cuando puede ser necesario limpiar las canaletas y bajantes integradas para asegurar un drenaje adecuado y limpiar el marco para eliminar la suciedad.

Revisa las hojas con frecuencia

Las hojas o lamas ajustables son la parte más importante en este tipo de pérgolas, por lo que conviene repasarlas una a una para asegurarte de que todas funcionan correctamente y no se atascan.

Límpiala a fondo

Lo ideal para mantener tu pérgola bioclimática a punto es limpiarla dos veces al año: en primavera, para prepararla para el verano; y a comienzos del otoño, para prepararla para los meses más fríos.

Ten cuidado con los utensilios que usas para limpiarla

Para mantener el buen estado de tu pérgola bioclimática, es importante que no utilices productos de limpieza que puedan afectarle negativamente. Nunca uses mangueras de agua a presión, estropajos, cepillos de raíces ni lejía, amoniaco u otros productos altamente corrosivos. Con un paño suave de microfibra, agua y jabón neutro bastará para conseguir el objetivo.

Si hay alguna zona especialmente sucia, puedes utilizar vinagre blanco, pero recuerda que tendrás que enjuagarla después.

Prepárala para las nevadas

Si en el lugar donde vives nieva, tendrás que asegurarte de quitar la nieve que se acumule sobre las lamas tras las nevadas para evitar que se deteriore la estructura por el exceso de peso. Se recomienda dejar las hojas abiertas cuando nieva para evitar estas acumulaciones.