Cuando termina el verano, es importante proteger a la piscina durante los meses de otoño e invierno. Para ello, nada como las cubiertas para piscinas. Existen muchos tipos en el mercado y son una gran alternativa, no sólo para mantener la piscina en buen estado, sino también para proteger a los más pequeños de la casa y aquellos que no saben nadar, de posibles accidentes. Te contamos cómo escoger un cerramiento de piscina adecuado.
Conoce los tipos de cubiertas para piscinas
Es posible escoger entre distintos tipos de cubiertas para piscinas, todo depende de lo que estés buscando. Y es que las cubiertas para piscinas pueden clasificarse en función de los materiales, la altura y hasta el mecanismo de acción. Pero también es importante hacer una diferencia entre cubiertas para piscinas y cobertores, llamados también lonas.
Los cobertores pueden ser de invierno, de verano y de seguridad. Los primeros son los que se emplean cuando la piscina no está en uso, es decir, durante el otoño e invierno. El uso de cobertores de invierno impide que el agua de la piscina se ensucie y la mantiene protegida de los efectos del sol. Por su parte, los cobertores de verano son la mejor alternativa para mantener y aumentar la temperatura del agua mientras la piscina está en uso. Los más populares son los cobertores de burbujas y vienen en distintos grosores. Por último, los cobertores de seguridad o protección incluyen estructuras de refuerzo que aportan resistencia y seguridad. Así es posible evitar accidentes.
Cubiertas para piscinas: lamas en superficie y sumergidas
Uno de los tipos de cubiertas para piscinas son las conocidas como de lamas, que tienen mucha demanda entre los usuarios. Esto se debe a que son ideales para los meses de verano, pero también para aportar seguridad. Suelen fabricarse en PVC y policarbonato, pudiendo encontrarse en diferentes grosores, además, su funcionamiento es automático. Las cubiertas de lamas se clasifican en dos:
- En superficie. La estructura de la cubierta, incluyendo el enrollador, se encuentran fuera de la piscina. Estos elementos se colocan en un extremo del vaso.
- Sumergidas. Este tipo de cubiertas para piscinas se coloca en el interior del vaso de la piscina.
Cubiertas por diseño y altura
Por su diseño y altura, las cubiertas para piscinas se clasifican en cuatro. Es así como podemos encontrar cubiertas planas y que se asientan a ras de suelo. Son una buena opción porque no permiten el baño mientras la cubierta esté puesta. También encontramos las cubiertas transitables, cada vez más populares entre los usuarios. Este tipo de cubiertas no sólo sirven para proteger a la piscina, sino también como terraza y solárium, sin poner en peligro la resistencia.
Si lo que buscas es darte un chapuzón, con la cubierta puesta, entonces elige las cubiertas bajas. En función del fabricante, pueden permitir el baño, mientras la piscina esté cubierta. Eso sí, no se puede estar en el entorno de la misma. Por último, las cubiertas altas permiten darse un baño y estar en el entorno de la piscina, aunque la cubierta esté puesta.
Clasificación de cubiertas por su uso, tipo y ubicación
Por su uso y tipo, las cubiertas para piscinas pueden catalogarse en manuales, automáticas, fijas y móviles
- Manuales. Las cubiertas manuales requieren de la acción humana para poder funcionar.
- Automáticas. Incluyen mecanismos que permiten que la cubierta se abra y cierre sin necesidad de que los bañistas hagan ningún esfuerzo.
- Fijas. Son las cubiertas que, una vez instaladas, permanecen siempre fijas. Pueden mantenerse fijas de forma parcial o en su totalidad.
- Cubiertas para piscinas desmontables o móviles. Son mecanismos modulares que permiten el desplazamiento de las partes de la cubierta. Así, la piscina puede quedar totalmente descubierta.
Cuando se trata de elegir la cubierta para piscina que más se adapte a tus necesidades, es importante tener en cuenta la ubicación de estas cubiertas. Es así como podemos encontrar las cubiertas independientes, equipadas con una estructura totalmente independiente a otras estructuras adyacentes. Estas cubiertas se asientan sobre el suelo. Por otra parte, puedes escoger las cubiertas adosadas. Estas necesitan de los muros o paredes para poder funcionar. Es decir, la estructura no se coloca en su totalidad sobre el suelo.
¿Qué tener en cuenta para elegir cubiertas para piscinas?
A grandes rasgos, ya sabes los tipos de cubiertas para piscinas que existen. Debes elegir la que se adapte a las necesidades de tu piscina y del hogar. Pero además de tener en cuenta el tipo de estructura, también debes prestar atención a los materiales de la cubierta. Hoy en día, los materiales más populares son:
- Aluminio y aleaciones de este, como el acero.
- Madera laminada o madera maciza.
- Policarbonato transparente o traslúcido (para ventanas y paredes).
- Cristal templado o laminado, también utilizado para las ventanas y paredes de la cubierta.
Por último, si tienes una piscina de pequeñas dimensiones, te recomendamos utilizar las cubiertas hinchables.
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